Appartamento con 4 stanze fronte mare

Vacaciones en la playa agridulces. Esta casa tiene un pedazo balcón mirando al mar, en el centro mismo del pueblo (implica cercanía de comercios pero también mucho ruido del paseo marítimo). El resto de la casa es un pasillo eterno, con los baños uno en cada punta. Salvo un plato de ducha moderno, el resto es un apartamento antiguo, oscuro (todo minipatios interiores y descuidado (colchones de muelles que se clavan, cortinas y cabecero de cama sucísimos). Me dio una descarga eléctrica fregando y no me habían avisado que había un problema eléctrico y la toma de tierra estaba desconectada. El dueño era majete y la de la agencia una mujer atenta, pero poco coordinados. Para descargar el equipaje es muy incómodo, porque no se puede acceder con el coche hasta una manzana entera del portal. El balcón lo compensa casi todo. Pero me gusta ser sincero con otros huéspedes para que sepan qué van a encontrar.