Casa con piscina

Este lugar fue un descubrimiento gracias a una amiga que me lo recomendó. La casa está literalmente a estrenar, fuimos a finales de agosto y se ve que está recién pintado y reformado. Es una casa típica leonesa con su patio interior lleno de luz mezclando detalles antiguos (las macetas de piedra rústica para las flores me encantó) con modernos (como unos patitos muy graciosos dibujados que hay dibujados). Además tiene una piscina climatizada en la que te relajas y te olvidas del estres. Recomiendo este sitio tanto para parejas que quieren ir a pasar un fin de semana de tranquilidad y paz, como para un grupo de amigos que quieran reservar toda la casa (no sé cuanta gente cabe pero al ser una casa rural cabrán poquitos). El pueblo es muy tranquilo y si le preguntáis a la dueña podéis ir a explorar las antiguas bodegas donde la gente fabricaba su propio vino. Son como las casas hobbits!! Nosotros fuimos en coche, y a 10 minutos está La Bañeza, donde tienes todo tipo de tiendas y restaurantes. Aunque yo siempre voy a lo seguro: patatas bravas y pulpo a la gallega. Otra opción es pasar el día caminando por el campo o en el río. Hay uno en el mismo pueblo, y otro en Cebrones.